Después de mucho
tiempo sin aparecerme por estos lares, he decidido retomar para este post una
idea que viene rondando mi cabeza desde hace mucho; así que con mi iTunes
abierto y un remix del videojuego Doom sonando (el cual por cierto no tiene DLC
alguno) he decidido ponerme a escribir sobre lo que pienso de este enigmático y
escabroso método usado en los videojuegos para añadirle contenido “adicional” a
los videojuegos.
En primer lugar,
como todos sabemos o creo que sabemos, el tema de los DLC en los videojuegos es
algo relativamente nuevo en lo que a consolas se refiere, no así por lo que
hace a los juegos de PC, que desde tiempos ancestrales han tenido y disfrutado
de expansiones y adiciones mediante este formato, así que de momento, dejaré de
lado los juegos de dicha plataforma (PC).
A raíz de la
actual generación de videojuegos (Xbox 360, PS3 y Wii) la conectividad por
internet se ha hecho indispensable en los mismos, y es mediante esto que las compañías
notaron el enorme valor de las micro (y a veces no tan micro) transacciones que
se hacen mediante este formato; así pues no es de extrañarnos que justo después
de la salida de un determinado juego, aparezca al poco tiempo DLC del mismo que
promete expandir y aumentar nuestra experiencia de juego, ya sea mediante
niveles adicionales, trajes extra, habilidades nuevas, opciones ,mejoradas y un
sinfín de adiciones que “originalmente” en el juego no venían incluidas o no
cupieron por X cuestión.
Todo lo anterior
suena extremadamente bien, y lo es de hecho, sólo por el pequeño detalle que
obviamente estas adiciones no son gratis (al menos no la mayoría), e implican
irremediablemente un gasto adicional por parte del usuario; y el hecho de que
obviamente estos DLC tengan un precio adicional no es algo que deba molestarnos
(al menos no a mi), el problema viene cuando el no comprar este DLC representa ya
una merma para la calidad o experiencia de juego en si, ¿me explico? En otras
palabras, tenemos la problemática de que a veces el no comprar este DLC sí
representa una incomodidad o desventaja para el usuario que NO desea comprarlo.
Pongamos como
ejemplo el caso de Gears of War 3. En dicho juego, casi inmediatamente después de
su lanzamiento comenzó a anunciarse contenido adicional al mismo, y a fines del
2011 salió el primer DLC llamado “Horde command Pack” el cual incluía 3 nuevos
mapas para multijugador, 3 personajes adicionales para dichos modos de juego, y
fortificaciones extras para el modo “horda”; hasta aquí todo parecía bien, con
el detalle que poco tiempo después, Epic Games liberó otro DLC para dicho
juego, posteriormente lo hizo de nuevo y al final de cuentas en menos de un año
teníamos 4 distintos DLC que complementaban la experiencia multijugador y de
campaña respectivamente y que representaban obviamente un gasto adicional (y con
un precio total de cási la mitad del juego original) para quienes lo hubieran
adquirido. Finalmente quien no deseó hacer dcho gasto simplemente no los
adquirió, pero entonces viene el problema: no tener dichos DLC te obliga
irremediablemente a jugar partidas multijigador online en una categoría
diferente, una categoría en donde no existen los llamados servidores dedicados,
y por ende el lag y ventajas del hosting se hacen evidentes e insufribles, por
el simple hecho de jugar sin los mentados DLC.
Una empresa que
al parecer cree que el DLC es la clave de la abundancia económica es CAPCOM; en
el juego “Capcom X Tekken” varias opciones y modificaciones adicionales al
juego pueden ser adquiridas mediante DLC comprado para el mismo, pero el
problema esta en el momento de darse cuanta que dichas opciones y características
YA VIENEN INCLUIDAS en el juego en sí, pero para desbloquearlas es necesario pagar
adicionalmente por ellas.
¿En serio? ¿Pagar
de más por algo por lo que precisamente ya pague? Si ya di una determinada
cantidad de dinero para adquirir X o Y título, es justo al menos que todo lo
que ahí contenga pueda ser accesado por mi sin necesidad de desembolsar mas
dinero, y, a menos que yo desee algo adicional no programado en el juego,
entonces sí pague por eso. El juego Street Fighter III de la misma empresa también
tiene un personaje y opciones adicionales que sólo pueden ser accesadas comprándolas.
Ya para terminar,
no quiero decir que el DLC sea malo o dañino (en ningún momento lo he dicho), es
una excelente opción para ampliar la experiencia del videojugador sobre
nuestros títulos favoritos (yo disfrute mucho los DLC de Gears of War 3
independientemente de lo pronto que salieron uno de otro), tener canciones
adicionales, autos nuevos, mapas extras y demás; finalmente quienes no los
desean no los adquieren y listo. El problema viene cuando las empresas creen
que es un método fácil de añadir opciones que no estaban terminadas aún por
querer sacar rápido un juego, o una vía rápida de sacarle dinero al jugador; el
DLC creo yo que debe ser empleado más concienzuda y moderadamente, para ideas
que no se les ocurrieron al sacar o idear el juego, rectificar o complacer a
los fans sobre detalles en el mismo (Mass Effect 3), etc. Pero repito: sin
abusar ni sobreexplotarlo.
Espero me hayan
entendido, ya por fin dije lo que pensaba, nos seguimos leyendo